Desde su llegada a Argentina, una de las preocupaciones de las personas inmigrantes de origen protestante tenía que ver con la necesidad de despedir dignamente a sus seres queridos, que no eran admitidos en los cementerios que funcionaban en cercanías y en estrecha relación a las iglesias católicas.
Por esa razón, además de aceptar ser sepultados en cementerios para "disidentes", algunas colectividades trabajaron por crear sus propios cementerios.
La CEABA ofrece a su membresía y también a toda la comunidad, la posibilidad de acceder a dos lugares cuidadosamente diseñados, atendidos con calidad y con la posibilidad del acompañamiento pastoral, dos cementerios ubicados uno en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Chacarita) y otro en la zona norte, en Pablo Nogués.